Paraíso en la Costa de la Luz: las playas de Conil en las que te querrás quedar todo el año

La provincia de Cádiz es sinónimo de historia, gastronomía y naturaleza, entre otras muchas cosas. En TEACAMPA tenemos muy presente lo importante que es cuidar nuestro entorno, es por eso que nuestras tiendas están fabricadas con materiales 100% naturales. Además, están integradas en la naturaleza para que el impacto que estas tengan sobre el medio ambiente sea nulo: las tiendas se adaptan a la naturaleza, no al revés.

Las playas de Conil, que están situadas en la Costa de la Luz, tienen una ubicación privilegiada. Kilómetros de arena blanca y fina, aguas azules y transparentes que hacen que bañarte en sus aguas sea una experiencia única.

En las playas de este pueblo gaditano vivirás momentos inolvidables: por las disfrutarás de preciosos paseos y desconectarás mientras sientes la brisa del mar y escuchas el murmullo de las olas que vienen a morir a la orilla.

Además de playas, Conil también cuenta con pequeñas calas. Lo que diferencia a estas de las playas es que son más pequeñas, tienen forma curvada y sus aguas son más tranquilas.

A continuación, os dejamos nuestras playas y calas favoritas de Conil en las que podrás perderte y desconectar de todo, para que las disfrutes tanto como nosotros:

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Playa de la Fontanilla

Esta playa, que está al lado del pueblo,  es una de las más conocidas de la zona. Con 1200 metros de largo y 40 de ancho, es una de las más familiares de la zona; sus aguas poco profundas la hacen perfecta para disfrutar de un buen baño. Esta playa tiene chiringuitos y restaurantes donde poder disfrutar de la exquisita gastronomía de la zona. Una playa familiar, perfecta para disfrutar y desconectar en los días de verano. Además, es una playa accesible y para los previsores: la Fontanilla cuenta con la Certificación Ambiental 14.001 y la Q de Calidad Turística.

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Cala del Aceite

Una de las calas más bonitas de la zona, y que es ideal para resguardarse si sopla viento de levante. Aunque está un poco alejada del pueblo, se puede llegar perfectamente en coche o bici. Cuando llegas, el azul intenso del mar y el blanco de la arena aparecerán entre tus ojos que, fusionados con el rojo de los acantilados, dan lugar a un paisaje único.

Esta cala, aunque tiene solo 250 metros de ancho, cuenta con servicios de ducha, vigilancia y un chiringuito.

Un lugar perfecto para disfrutar de una de las calitas con más encanto de la costa gaditana.

Playa de Castilnovo‍

La playa de Castilnovo es una de las pocas playas vírgenes que quedan junto a un núcleo de población importante, como es Conil; más de dos kilómetros de longitud que la unen con la playa del Palmar de Vejer. Se puede llegar a ella o desde Conil o bien desde la playa del Palmar.

Esta playa no está muy frecuentada ya que hay que andar un buen tramo para acceder a ella, por eso es una zona en la que poder disfrutar tranquilamente del entorno. Además, esta playa está rodeada de salinas abandonadas, y de la Torre Almenara de Castilnovo, lo que también la hace muy atractiva.

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Cala del Puntalejo‍

Esta calita es la más cercana de Conil, la primera que nos encontramos cuando llegamos. Al igual que la Cala del Aceite, es ideal para visitar cuando sopla el viento de levante, ya que te guarece de él y no es tan molesto como en una playa más abierta. Es bueno ser precavidos en esta calita a la hora de bañarse, porque cuando baja la marea aparecen unas rocas que no se aprecian cuando está la marea alta.

Con 180 metros de longitud, es una playa pequeña, por lo que no tiene chiringuito ni tienda cercanos, lo que la hace ideal para perderse y desconectar completamente.
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Estas son algunas de las playas que podrás disfrutar cuando visites TEACAMPA Conil. De playas vírgenes, a calas, pasando por otras algo más concurridas, que harán que la experiencia de disfrutar de ellas y de bañarte en sus aguas tardes mucho tiempo en olvidar. Además, queremos que el espíritu TEACAMPA se expanda, y es por eso que apostamos por un entorno libre de residuos, de forma que lograremos que nuestro entorno, este pequeño paraíso, se mantenga cuidado y podamos disfrutarlo muchos años más.